Hace algunos días el alcalde de la ciudad de Medellín, Daniel Quintero, se sumó a la lista de gobernantes colombianos que han pedido apoyo al régimen comunista de Cuba con sus misiones médicas para atender la emergencia de salud generada por la Covid 19. Los otros líderes políticos que ya habían hecho la misma solicitud a la embajada de la isla centroamericana, fueron el Gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo y el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina; todos tienen en común su afinidad ideológica de izquierda y su apoyo al senador y ex candidato presidencial Gustavo Petro.
Si bien el alcalde Quintero Calle expresó que “la vida debe de estar por encima de la política” y que su solicitud de apoyo tenía un propósito humanitario, llama la atención que no hubiera consultado con los gremios de salud locales y nacionaesl para conocer su opinión al respecto y saber qué otros médicos locales podían ayudar con el déficit de personal en el manejo de Unidades de Cuidados Intensivos.
A pesar de que el alcalde de Medellín hizo un llamado la “despolitización” de la solicitud, la sola iniciativa de solicitar apoyo a una misión médica del régimen comunista cubano, ya posee una carga ideológica ineludible. Y más aún cuando se han conocido investigaciones serias como la que hizo la BBC sobre la instrumentalización de los médicos cubanos, que son tratados como esclavos para sostener el régimen castrista. “Según un informe de la organización Cuban Prisioners Defenders, una ONG con sede en España que defiende los derechos humanos en Cuba, los médicos reciben en promedio entre el 10 y el 25 % del salario pagado por los países de acogida, y el resto se lo quedan las autoridades de Cuba”.
Finalmente, y luego de un fuerte debate en la opinión pública, el alcalde Daniel Quintero, manifestó que iba a priorizar el talento local y nacional luego de dialogar con varios líderes gremiales del sector salud.